Deportivo Cali, una inagotable cuna de talentos

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En los últimos juegos aparecieron varios juveniles con grandes condiciones.

Rafael Santos Borré, Jesús Martínez, Cristian Higuita, Luis Orejuela y Miguel Murillo son apellidos que día a día se han ido ganando un lugar en el cuadro 'azucarero'. La mayoría de dichos futbolistas no superan los veinte años y ya están cumpliendo su sueño de defender los colores de su equipo en la categoría profesional.

"Estos muchachos tienen muchas condiciones, hay que seguir arropándolos y dándoles trabajo para que respondan, la gente debe de apoyarlos y reconocerles sus logros. A veces creo que soy injusto porque juegan poco", dijo el técnico del Deportivo Cali Leonel Álvarez.

Estos juveniles llegan con la energía de su edad, enfocados en ser las próximas figuras del club. Siguen los pasos de otros como Brayan Perea, Harrison Mojica, José Silva, Daniel Giraldo, Jefferson Murillo, Gustavo Cuéllar, Carlos Lizarazo. Todos con buen 'ADN' futbolístico, perfeccionado en las categorías menores del club.

"A todos los tenemos en cuenta y el que demuestre que está para jugar, jugará. Aquí no es por edad sino por condiciones porque confiamos en el grupo. Hay que acercarlos al primer equipo y pronto le darán muchas alegrías a la institución", agregó el timonel 'verdiblanco'.

Eso sí, algunos deben esperar más que otros, pero condiciones no les faltan. Detalle clave, la formación mental y competitiva elaborada en las divisiones menores por sus entrenadores. Los que pisan una cancha han cumplido con las expectativas pero respondiendo al perfil integral solicitado por los entrenadores juveniles. Así lo hacía el recientemente desaparecido Américo Orbes.

"El 'profe' Orbes nos conoció a la mayoría desde niños y una de las exigencias para jugar era mantener buenas notas en el colegio, el que tenía notas bajitas o perdía materias no jugaba. Había que ir al entrenamiento con la libreta, eso te crea responsabilidad con tus labores", recordó el defensa Luis Calderón.

Otra de las enseñanzas para los juveniles es aprender a esperar una oportunidad, con paciencia y respeto. Allí se da una prueba de fuego para muchos porque la ansiedad y en algunas oportunidades, las palabras de su entorno les terminan 'comiendo' la cabeza.

"Uno quiere jugar siempre, pero debe saber esperar, hay que hacer sacrificios y también ser consciente que las oportunidades llegarán. Lo importante es ser tenido en cuenta y saber que en cualquier instante das el salto al primer equipo", expresó el lateral Jesús Martínez.

El trabajo es exigente porque muchos pueden llegar, pero son pocos los que logran mantenerse y aguantar la presión de una tribuna exigente y la férrea crítica deportiva local. Hoy por hoy Leonel Álvarez impulsa a varios juveniles, en primera instancia por necesidad y luego al reconocer sus cualidades, por convicción.

"Sabemos lo que es jugar en el Deportivo Cali, pero hay que ganarse el respeto con fútbol, allí la gente lo conoce a uno y valora sus condiciones y el amor por la camiseta", declaró el delantero Rafael Santos Borré.

Lo particular de la institución, siempre aplaudida por la aparición de grandes talentos, es que cada que se abre el mercado de contrataciones es la primera en salir a buscar 'la contratación del año'. Algo que, por cierto, hasta ahora no la ha logrado.